Neuromoduladores
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¿Qué es el tratamiento de Neuromoduladores?
Los neuromoduladores son sustancias que inhiben la contracción de los músculos donde se infiltran. La clave de su utilización en medicina estética radica en su capacidad para relajar temporalmente los músculos tratados, suavizando las líneas de expresión y evitando que aparezcan arrugas faciales en el rostro. El efecto rejuvenecedor se ve a los pocos días y suele durar unos seis meses.
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¿En qué consiste el tratamiento de Neuromoduladores?
La persona que se somete a un tratamiento con neuromoduladores busca una apariencia rejuvenecida y natural sin perder su expresión facial única. Los neuromoduladores se inyectan con precisión en áreas específicas del rostro, concretamente en los músculos involucrados en la formación de arrugas como la frente y el entrecejo. La experiencia del especialista es lo que asegurará los resultados naturales.


Los neuromoduladores se pueden aplicar en el tercio superior de la cara, sus efectos sobre las arrugas se aprecian al cabo de unos días y perduran alrededor de los 6 meses. Pasado este tiempo, el paciente puede volver a realizar el tratamiento si lo desea.
Por otro lado, los neuromoduladores también se pueden emplear como tratamiento para el bruxismo y la hiperhidrosis axilar, dando muy buenos resultados en estos casos.
Centro autorizado por el Ministerio de Sanidad y Farmacia para la aplicación de toxina botulínica en indicaciones médicas por ser «Hospital de día U.65».
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¿Qué es el “baby botox”?
El baby botox es un tratamiento con neuromoduladores en el que se aplica una dosis inferior. De esta forma lo que se consigue es debilitar el músculo en vez de paralizarlo, y así se contrae con menos fuerza, evitando la aparición de las primeras líneas de expresión.
Su objetivo, por tanto, es más el de prevenir las primeras arrugas, más que eliminarlas.
¿A qué edad se recomienda un tratamiento con neuromoduladores?
No hay una edad estipulada en la que se recomiende el uso de neuromoduladores, pero la tendencia es a emplearlos cada vez a una edad más temprana, de cara a retrasar el envejecimiento.
La experiencia nos indica que en cuanto aparecen arrugas de forma estática se puede comenzar a aplicar tratamientos con neuromoduladores a dosis bajas, y así evitar que las primeras arrugas se vayan marcando en el rostro.
¿Puedo retomar mi vida normal después de una infiltración?
Sí, aunque teniendo en cuenta ciertas pautas es aconsejable respetar las primeras 4 horas tras el tratamiento.
Es importante que no te des masajes en el rostro, al menos hasta pasados un par de días. También debes evitar piscinas, saunas, ejercicio físico intenso el mismo día de la sesión.
Por otro lado debes evitar ponerte boca abajo o en posición horizontal, al menos 4 o 5 horas después del tratamiento, y mantener una buena alimentación y no beber alcohol durante esas primeras 24 horas.
¿Se utiliza algún tipo de anestesia?
Para la mayoría de las personas, el tratamiento con neuromoduladores no es un procedimiento doloroso. Simplemente se suelen sentir pequeños «pinchacitos». Pero si la molestia es importante, se puede aplicar previamente una crema anestesia tópica.
¿Cuánto tiempo duran los efectos?
La duración de los resultados de la aplicación de los neuromoduladores es de unos 3 a 6 meses.
¿En qué zonas se pueden utilizar neuromoduladores?
La zona en la que más se aplican los neuromoduladores, es en el tercio superior del rostro. Así el entrecejo, el contorno de ojos y la frente es donde la mayoría de las veces se inyecta esta sustancia.
¿Se pueden quitar las arrugas marcadas en la frente con neuromoduladores?
Los neuromoduladores ayudan a minimizar la contracción muscular de la zona en la que los apliquemos, de esta manera se favorece una relajación total que evita que se sigan formando líneas de expresión, a la vez que se mantiene la expresión facial del paciente.
Si las arrugas ya están marcadas, con los neuromoduladores conseguiremos frenar la profundidad del surco y comenzaremos a rebajar la intensidad de las arrugas cada vez que realicemos el tratamiento.